Chequia tras la caída del Comunismo
La economía de la República Checa es actualmente una de las más desarrolladas y estables entre las democracias emergentes de Europa Central y del Este.
El crecimiento económico fue relativamente lento en comparación de otros países de Europa occidental que partían de una renta similar a la checoslovaca.
Después de 40 años de comunismo, el gobierno totalitario perdió popularidad y credibilidad ante la gente por el abuso de poder. La población estaba disconforme con el régimen y con su sistema social, político y económico que limitaba sus habitantes. Es innegable que durante la transición Checa hubo en estabilidad en el país, dado que fue un periodo lleno de cambios.
En tiempos del comunismo, las personas en Chequia no recibían retribución económica por su trabajo, porque el sistema no les permitía. A la adoptar el sistema capitalista neoliberal, los trabajadores empezaron a percibir sueldos que les permitió adquirir bienes necesarios y aún más de lujo, así mejoraron en su calidad de vida y elevó su capacidad adquisitiva.
En cuanto al PIB, se distingue un periodo de crecimiento continuado de 1993 a1995, que llegó a alcanzar el pico máximo de incremento en el 6,5 % y cuya causa principal es la entrada de capitales extranjeros. Posteriormente, se produjo una caída del crecimiento, que llegó a ser negativa en 1997 y 1998. Esta es la conocida como la primera gran crisis de Chequia, y fue originada principalmente por la expansión desordenada y las políticas del liberalismo económico de intervención mínima llevadas a cabo por el gobierno de Václav Klaus.
Otro factor en el que se distingue ese crecimiento es en la tasa de desempleo, que se mantuvo en la década de los 90 por debajo del 5%, aunque en los años posteriores fue aumentando, alcanzando su máximo histórico en el año 2000
Checoslovaquia experimentó a su vez tras la caída del comunismo un gran cambio en su sistema financiero tras la transformación hacia una economía de mercado. Actualmente el sector financiero es un sector solvente en un país que se caracteriza por la presencia extranjera. Su no dependencia del Banco Central Europeo supone una mayor capacidad para atenuar los impactos de las crisis financiera, a través de su política monetaria propia.
Es importante señalar que las medidas económicas tomadas al inicio de la transición Checa, lograron controlar de manera oportuna los problemas de inflación, desempleo, entre otros, logrando que los índices se mantuvieran, bajos y constante durante años, siendo hecha la causa de que la República Checa fueron un modelo modelo a seguir para los otros países europeos.
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